miércoles, 13 de junio de 2007

Al Sol

Hay días en los que la vida
huele a cadáver pudriéndose al sol.

Días en los que ese mismo sol

ilumina tu grotesca mugre de alta calaña

y hace derramar tus gotas de grasa sudada.


Algunos ya terminaron de purgarse de deseos.

Ya escupieron sus últimas esperanzas de felicidad

y hoy vomitan el llanto atragantado.


Aún te enamoran los espejitos de colores.

Ellos se encantan con el ingenio con que somos estafados. Y estafados.

martes, 15 de mayo de 2007

Rosas

rojas, yermas rosas;
rugen
ruedan
roncan

el vómito negro del hastío
las devora.

jueves, 3 de mayo de 2007

Opus 5 Nº 4: "Reflexión sobre la prolongada ausencia del paquete de queso rallado"

Visto y considerando

que te fuiste hace veintiocho días a comprarlo
y aún no volviste...

voy a comer los fideos solos.

O trataré.

domingo, 29 de abril de 2007

masomenos (1+5^(1/2))/2

unocomaseisunoochentatreintaytres

noventayochoochentaysietecuatronueveochonueve

dosvecescuarentayochoveintecuarentaycinco




jueves, 26 de abril de 2007

Sin ganas de morirme

Y a pesar de sentirme tan triste,
a pesar de haber fingido de manera excelente la felicidad estos últimos días,

muy lejos estoy de querer morirme.


Morirme no me causaría tristeza,

morirme cambiaría mi rutina.

Morirme en este momento me parece una desgracia tan grande,

una injusticia, una burla.

Realmente una hijaputez.

Es más, sería tal el grado de impotencia si me muriera,

que tendría ganas de morirme.


Y prometo no estar siendo caprichoso.


No entendés.

No entiende.

No entienden.


No es que te ame, es que realmente me cuesta distinguir entre vos y el amor.

Y quisiera anticiparme al lector desprevenido y rogarle,

aunque sólo sea por pura formalidad y protocolo,

que crea mis mínimas palabras. Necesito describirla, y ésta es una de las únicas maneras que tengo.

Yo le aseguro que si usted la conociera,

si la hubiese oído llorar,

si la escuchara decir "Te quiero",

si la hubiese odiado como yo la odié,

si se diera cuenta de que está vivo,

me entendería cuando digo que si me hablan del mundo, pienso en ella,

que ella es mi esencia,

que cuando pienso en amor, pienso en ella,

y, finalmente y sin querer comenzar ninguna discusión,


para mí,


El Amor es Ella.

domingo, 22 de abril de 2007

Lógica Proposicional

Si es domingo
y llueve
y la noche anterior soñaste con ella

ergo

la estás extrañando como loco.

martes, 10 de abril de 2007

Liberación

Me di cuenta de que ella también es un ser humano.

sábado, 31 de marzo de 2007

Cuestión de imagen

Pocos tienen en cuenta que detrás de todo juvenil e inocente Willy, se esconde un maduro Guillermo.

martes, 27 de marzo de 2007

Luna congelada


Con esta soledad
alevosa
tranquila
con esta soledad
de sagradas goteras
de lejanos aullidos
de monstruoso silencio
de recuerdos al firme
de luna congelada
de noche para otros
de ojos bien abiertos

con esta soledad
inservible
vacía

se puede algunas veces
entender
el amor.



Mario Benedetti
Luna Congelada

miércoles, 21 de marzo de 2007

do.re.mi.sol

Se enamoró cuando cayó el último pétalo del tulipán más triste del florero. No sé si lo despertó el ruido contra el vidrio o las vibraciones del aire... Creo que más bien se sintió acorralado por la desesperanza. Se vio frágil y vacío. Pienso que lo aterraba la idea de morirse solo. Ni aquel pétalo melancólico la esperaba ya.

De pronto, un punto se volvió verde en aquella angustia homogenea, diaria. Sofocante.

Por fin pudo pestañear.

Decidió darle una pincelada a su vida gris. Recordó que no todas las melodías suenan en fa menor. Y aprendió, felizmente, que la risa de las flores cuando una oruga camina sobre ellas, es sincera.

Dudando hasta de su optimismo se embelleció lo más que pudo, se vistió transparente y, por las dudas, se llenó el bolsillo de caramelos.

Cuando por fin la tuvo enfrente derramó su vida sobre ella. La miró con ojos de fin de marzo y apostó su última sonrisa.


Ella lloró.

lunes, 19 de marzo de 2007

La inteligencia de las flores

" La vallisneria es una hierba bastante insignificante que no tiene nada de la gracia extraña del nenúfar o de ciertas cabelleras submarinas. Pero se diría que la naturaleza se ha complacido en poner en ella una hermosa idea. Toda la existencia de la pequeña planta transcurre en el fondo del agua, en una especie de semisueño, hasta la hora nupcial en que aspira a una vida nueva. Entonces la flor hembra desarrolla lentamente la larga espiral de su pedúnculo, sube, emerge, domina y se abre en la superficie del estanque. De un tronco vecino, las flores masculinas que la vislumbran a través del agua iluminada por el sol se elevan a su vez, llenas de esperanza, hacia la que se balancea, las espera y las llama en un mundo mágico. Pero a medio camino se sienten bruscamente retenidas: su tallo, manantial de vida, es demasiado corto; no alcanzarán jamás la mansión de luz, la única en que puede realizarse la unión de los estambres y del pistilo. ¿Hay en la naturaleza una inadvertencia o prueba más cruel? ¡Imaginaos el drama de ese deseo, lo inaccesible que se toca, la fatalidad transparente, lo imposible sin obstáculo visible!. "

Maurice Maeterlinck
La inteligencia de las flores

lunes, 5 de marzo de 2007

Como una mariposa

Qué me importa volar eternamente hacia vos, Princesa?
Cuál es el problema de ser una mariposa?
Hay asuntos que, por protocolo, conviene no tocar. Pero me gustaría que sepas lo incómodo que hacés sentir al resto con tu presencia. Y cuando digo "presencia" me refiero a existencia. Y necesito decirte, aún a costa de no ser entendido, lo diferentes que son estas palabras a las anteriores. Es que sólo el arte y el amor (aunque a veces sean lo mismo) son mis únicos refugios para no desesperarme ante la plástica miseria de un conjunto de reacciones químicas podridas que dicen ser sentimientos. Este texto sos vos. Es, modesta y humildemente, arte. Es amor. Es refugio. Es agradecerte por haber hecho que me de cuenta del ultraje, del engaño que es muchas veces la vida. Desprecio la idea de ser una marioneta.

El problema no es que no nos dejen volar, es que mueven todo el resto para disimular nuestro vuelo.

Al fin y al cabo, la vida es un juego con reglas que nunca aceptamos. Pero me alegra la idea de no ser una gallina golpéandose constantemente contra la pared de vidrio. Me gusta poder alejarme un metro, sentarme, reirme y saber que no la puedo pasar.

No me importa caer si siento el aire pasar por mis alas agujereadas.